La Catedral de Barcelona es de tres naves, pero con un solo ábside y deambulatorio, o girola. Las naves tienen cinco tramos; el tramo inmediato a la fachada es más largo que los otros tres, para acomodar sus medidas a las del cimborrio que se levanta junto a la puerta principal.
La estructura típica del gótico catalán, ordenada para aprovechar los espacios interiores de los contrafuertes, permitió abrir hacia el interior de la Catedral una serie seguida de capillas secundarias que circundan toda la basílica: en las naves, estas capillas son dos para cada tramo.
Sobre los extremos del tramo próximo al presbiterio, libre de capillas laterales, se levantan las dos grandes torres-campanario, una encima del portal de san Ivo y otra sobre la puerta interior de acceso al claustro; en las terrazas de la basílica, estas torres son octogonales, con un cuerpo prismático, destinado a escalera, que está adosado (1386-1393 y siglo XVI).
Grandes ventanales, abiertos sobre la boca de las capillas radiales de la girola, iluminan el presbiterio. Por encima de las capillas, en las naves laterales, corre una galería alta con los ventanales abiertos sobre el muro exterior de la basílica. Un pequeño triforio rodea la nave central y el presbiterio cerca de la bóveda.
Dimensiones
Las dimensiones exteriores de la Catedral son de 93 metros de largo, 40 de ancho y 28 de altura en la nave central. Los campanarios suben hasta los 54 metros. El cimborrio tiene 70 metros de altura por fuera y 41 metros por dentro.
Las medidas interiores de la Catedral, sin contar las capillas de cada lado, son de 79 metros de largo y 25 de ancho; la entrada de cada capilla tiene 9 metros de altura, con 5 metros de ancho y unos 6 metros de profundidad. La nave central es de 13 metros de anchura y 26 de altura. Las naves laterales tienen 6 metros de amplitud y 21 metros de altura; los pilares, desde la base hasta el inicio de los arcos, tienen 15 metros de altura.
Pintura
En las capillas de la Catedral se conservan retablos góticos realizados por Guerau Gener, Lluís Borrassà, Gabriel Alemany y Bernat Martorell, entre otros.
El Museo de la Catedral conserva pinturas góticas de artistas como Pere Destorrents, Jaume Huguet, o Bartolomé Bermejo, autor de la Piedad.
Artes Decorativas
La custodia
La custodia es uno de los tesoros de la Catedral; realizada en oro y plata, está ornamentada con joyas que fueron ofrenda de arraigada devoción popular. Desde mediados del siglo XV, la silla del rey Martín, de plata dorada, hace las funciones de peana de la custodia. Esta silla recibe su nombre al tratarse de un supuesto legado o donativo del rey Martín el Humano y data del s. XIV.
Sillería del coro
La sillería del coro de la Catedral data de los siglos XIV y XV. En los respaldos de la sillería figuran los escudos de la Orden del Toisón de Oro del s. XVI.
En este conjunto, también destaca el púlpito, obra de Pedro Çanglada y Matías Bonafé con la colaboración de Antonio Claperós y John Lambert, realizada entre los años 1394 y 1499. Los altos doseles en forma de pináculos, del año 1499, son obra de los artistas Kassel y Michael Lochner.
El trascoro está cerrado con un paramento de mármol con relieves del s. XVI, realizado por Bartolomé Ordóñez y Pedro Villar.
Clave de bóveda
La catedral tiene un total de 215 claves de bóveda, que datan de los siglos XIV i XV.
Fueron restauradas el año 1970, cosa que permitió descubrir que eran policromadas.
Las claves de bóveda de la nave central, comenzando por el presbiterio son:
- Cristo crucificado entre la Virgen y san Juan con los símbolos del sol y la luna.
- Santa Eulalia con el escudo de Blanca de Nápoles, esposa de Jaume II. Datada de 1320.
- Virgen de la Misericordia, acogiendo en su capa, a un lado, un papa, un rey, un cardenal, un obispo y un canónigo, al otro lado, a la reina, una religiosa y tres figuras femeninas más. Data de 1379.
- La Anunciación: La Virgen con el arcángel san Gabriel. Año 1379.
- Un obispo con diáconos, se cree que es el obispo Pere Planella (1371-1385) por estar su escudo en el lateral de la clave.
- Padre Eterno envuelto de ángeles, del escultor Pere Joan realizada el año 1418.
Otra gran clave es la que se encuentra en la cripta de Santa Eulalia, representando a la santa con la Virgen y el Niño. Cerca de la puerta de san Ivo, su clave representa a san Pedro, envuelta por otras cuatro más pequeñas de forma trilobulada; en la puerta de salida del claustro, en el lado opuesto, está representado san Juan con el águila.
Los vitrales
La Catedral tiene numerosos vitrales góticos y modernos. Todos siguen el mismo esquema de tres calles, la central con la imagen del titular y las laterales con decoraciones geométricas que enmarcan escudos reales, de la ciudad, ángeles, etc. y coronación trilobulada.
Las épocas de los vitrales se pueden dividir en cuatro etapas: La primera data de los años 1317-1334, por el escudo del obispo Ponç de Gualba que se aprecia en la vidriera de la santa Cruz y santa Eulalia; recoge los seis vitrales centrales de la cabecera, encima de las capillas radiales. Adicionalmente, la de san Pedro, la de san Juan, la de san Esteban, la de san Nicolas y la de san Miqguel, donde en los laterales hay cabezas de ángeles.
La segunda etapa, entre el último tercio del siglo XIV y principio del siglo XV, son los de los extremos del ábside: la del papa san Silvestre, con cabezas de obispos en los laterales, realizado en 1386; san Andrés con los escudos del obispo Armengol del año 1398/1408 y el de san Antonio Abad, realizada por Nicolás de Maraya los años 1405-1407.
La tercera etapa son los vitrales realizados a finales el siglo XV, como el vitral del Noli me tangere, situado en la capilla del baptisterio, es obra de Gil de Fontanet, con cartones dibujados de Bartolomé Bermejo del año 1495.
La cuarta etapa abarca desde finales del s. XIX hasta finales del s. XX e incluye los ventanales de la fachada y de las paredes laterales.